La Frauenkirche (Iglesia de Nuestra Señora), símbolo de Dresde, es una espectacular iglesia luterana barroca.
Destruida totalmente durante la Segunda Guerra Mundial, la antigua RDA mantuvo sus ruinas como un monumento que recordara la destrucción de la guerra. Después de la caída del Muro de Berlín, se comenzó su reconstrucción.
Hay que subir a la torre para disfrutar de unas vistas fantásticas de toda la ciudad. Para acceder a la torre hay que pagar entrada.
Primero subimos en un ascensor y luego se sube por una rampa en espiral desde la cuál podemos observar la iglesia desde arriba ya que tiene una pared de cristal. La bajada es sólo por escaleras.
Era tarde, el autobús nos llevó desde Berlín a Dresde, que decían era imprescindible en la visita. Caminamos entre calles estrechitas y arquitectura tradicional alemana y de repente, avistamos la catedral. Era redonda, delicada y majestuosa a la vez, dominando la plaza y las tienditas de decoración típicas alemanas. Una visita obligada y placentera para todos.
Preciosa e imponente la iglesia luterana en la plaza del mercado nuevo.
