Illegal burguer

Llegué aquí de casualidad y descubrí una pequeña joya. Es una hamburguesería con en la que todo lo que he probado está delicioso y en el que puedes tener buena conversación con el dueño, camareros o casi cualquiera con el que se te siente cerca.

El dueño se ha traído de Estados Unidos la forma de hacer hamburguesas caseras y le ha añadido toques italianos (e imagino que el suyo propio). Los ingredientes son estupendos, nada de comida industrial.

Te puedes hacer tus hamburguesas con los ingredientes que quieras o elegir uno de los combos que tienen ya preparedos. Tienen ingredientes muy ricos y para hacer combinaciones originales (salsas de muchos tipos, tomates secos, cebolla caramelizada, guacamole, distintos quesos...) Los aros de cebolla son impresionantes y las batatas fritas para acompañe también.

Sus hamburguesas eran muy buenas, de la mejores a muy buen precio, pero la mala experiencia de sus dueños y la falta de inversión en el lugar los llevo al fracaso en mi opinión. Pero el amor y el empeño de su dueño por lo que hacía se notaba, aunque no tenía experiencia. Espero que no pierda su sueño y vuelva a intentar con más ganas y mejor proyección.