De pueblo a capital
Esta es la historia de cientos de pueblos autónomos que surgieron del comercio o de tierras perteneciente a la clase noble que fueron separadas para explotación ajena o dadas como regalo a los nuevos habitantes de las tierras. Estos pueblos surgieron como he dicho de rutas comerciales, por lo general siguiendo el río Támesis o sus afluentes más cercanos, como es el caso de Isleworth y el río Crane. Pero con el tiempo, la brutal expansión de la capital del reino, Londres, integro estos pueblos en sus feudos, dejando de ser lo que eran y pasando a ser barrios de Londres, pero no por ello perdiendo su identidad e historia.