No hay palabras para describir esta maravilla de Aranjuez, tanto por su inmensidad (es descomunal, en serio, me pasé una mañana entera caminando y no recorrí ni la mitad de sus infinitos pasillos) como por su belleza. Tuve la suerte de visitarlo además en Otoño y la belleza rezumaba por todos sus costados. Una preciosidad.
Uno de los jardines más bonitos que he visitado en mi vida. Dentro de él puedes encontrar el embarcadero real y a pocos metros el museo de faluas, espectaculares embarcaciones de los reyes de España; paseando por sus calles te encontrarás pavos reales, faisanes y alguna que otra simpática ardilla, la fuente de Apolo y la fuente de Narciso hasta llegar al estanque de los Chinescos donde se encuentran tres templetes de estilo griego, chinesco y egipcio. Un poco más adelante la Montaña Rusa (que actualmente está en obras) donde tendrías las mejores vistas del jardín y terminando por la Casa del Labrador museo de gran riqueza por sus estatuas y relojes.
El Jardín del Príncipe es uno de los atractivos turísticos principales de la villa de Aranjuez, por su patrimonio natural y por su patrimonio monumental.
En su interior, además de las múltiples y variadas especies arbóreas y florales, se puede disfrutar de monumentos como la Casa del Labrador, el Museo de Falúas, el jardín chinesco, además de pabellones, esculturas y embarcadero.
En el siglo XVIII se construyeron estos bellos jardines de 150 Ha. de extensión por orden de Carlos IV. En ellos se encuentra el Embarcadero Real, los jardines chinestos, la Casa del Labrador, la montaña rusa y diversas fuentes y estatuas.
Donde poder pasear y disfrutar de la naturaleza en estado puro desconectando del ruido de la ciudad, además de disfrutar de una visita a bonitas fuentes que se encuentran en su interior.
Éste es el lugar de relax y cura de stress por excelencia. En primavera y otoño es un paseo envidiable, por las sombras, los colores de las hojas, la variedad de plantas (árboles), el entorno, etc. Es un pariso para el fotógrafo, enfín que voy a contar... ¡es mi pueblo!.
A la vez que esa fauna que se encuentra en los jardines, es maravilloso. Por no decir las numerosas fuentes y museos que se encuentran dentro de los jardines, los cuales puedes ver.
El mejor de los paseos para perderse y relajarse tras 7 días de viaje, mientras impaciente espero la hora de encontrarme con una persona muy especial.
Disfruto de él desde las ventanas de mi hogar que dan a la calle Primavera y la calle de la Reina; profusa de ciudadanos que van allí a realizar sus ejercicios de deporte. Y a dar espléndidos paseos por este jardín lleno de bellos árboles, algunos de ellos frutales y con bellos animales.
Destacando especialmente el pavo real con lindos colores que despegan sus plumas como reclamo de las hembras. Ardillas, distintos pajaritos, etcétera. Un bello y amplio paraje que atrae al turismo nacional e internacional.
Largos y armoniosos paseos por el incomparable Jardín del Príncipe.
Pasear por Aranjuez tiene su encanto. Sus árboles frondosos, sus maravillosas calles...
Aranjuez hace que se respire romanticismo por todos lados.
Pienso que tanto los jardines como los Palacios de Aranjuez son impresionantes y que están muy bien cuidados.
En invierno la mayoría de los árboles no tienen hojas y las plantas no están en su mejor momento, aún así tiene un encanto particular, un excelente lugar para relajarte y olvidarte de la ciudad
