En nuestro primer día en el desierto, nos acercamos a este pequeño pueblo en el que viven personas de origen subsahariano. En una de las casas del pueblo, pudimos disfrutar de varias danzas bereberes mientras nos tomábamos un buenísimo te moruno. Es una manera de ayudar a las gentes del pueblo que se sacan de esta forma un dinero.
Khamlia es un pequeño pueblo a las a fueras de Merzouga donde unos exhiliados de la africa negra han creado su gheto. Allí sobreviven como todo el mundo con su ganado y sus tierras, pero para sacarse un dinerito extra hacen un espectáculo de un baile típico sudaní muy exótico la verdad. Si estáis por Merzouga y no teneis nada que hacer podeis preguntar como llegar hasta allí y disfrutar de este espectáculo, vale la pena.
Un pueblecito muy pequeño que se encuentra en lo que fue paso del París-Dakar. Paramos a comer en el único albergue de la zona, y a parte de que todo nos supo buenisimo, posiblemente lo mejor fue la hospitalidad de la gente y poder disfrutar de la vida del pueblo tranquilamente mientras tomabamos el te en la sobremesa.
Un lugar que nos encantó porque durante unas horas pudimos ver como es la vida de la gente en medio de desierto. Si podeis, una parada muy recomendable.
Id y ver sus casa,calles y os invitaran en un salón a poneros comodos y disfrutar de un te. El te del desierto es muy oscuro y mas fuerte que al que estamos acostumbrados incluso en el norte de Africa. Os bailaran, cantaran con sus instrumentos tipicos de la zona y os pediran un donativo.Es un espectáculo peculiar. Llevas chucherias o bolleria para repartir entre los niños de antes de este poblado
