Visita a un santuario sintoísta abandonado
Como reza el título, mi experiencia de este nuevo rinconcito fue la visita a un santuario abandonado. No es una historia de miedo. Era de noche, cuando estaba dando un simple paseo y me encontré con esta maravilla de lugar en medio de un barrio residencial de Yokohama. De casualidad vi un torii y me llamó la atención, fui y habían un montón de coches aparcados, parecía que era un aparcamiento dentro de lo que ya era considerado el área del santuario. Estaba todo en silencio, con una potente luz de la farola. Solamente se escuchaban mis pasos al andar, al pisar la gravilla.
Vi que había dos torii más en una escalera y que esa escalera llevaba a un lugar no visible lleno de frondosa vegetación. Aunque ahí no había luz, me atreví a acercarme y a subir, sin miedo alguno. No tendía mucho japonés, pero en un cartel que había al lado no ponía el kanji de "prohibido". Pero solo pasar el primer torii me llevé una desagradable sorpresa y es que por toda la cara y parte de la camiseta se me quedó pegada una telaraña. Yo muy fan de las arañas no es que sea, así que me alejé rápidamente unos metros mientras me quitaba la telaraña. Me hubiera gustado subir pero eran ya sobre las 11, madrugaba y no quería vérmelas con una araña enfadada en medio de la oscuridad así que me marché y días más tarde regresé.