Alcazaba de Málaga

La Alcazaba de Málaga se encuentra a los pies del monte Gibralfaro, al lado del teatro romano, y se asienta sobre los antiguos restos de una fortaleza fenicia.

Construida en el siglo XI, destaca por su integración con el entorno, y por la paz y tranquilidad que se respira paseando entre sus muros, que en otros tiempos servían para la guerra.
El interior de la Alcazaba tiene una gran cantidad de vegetación, y el suelo esta surcado por pequeños regatos con agua, por lo que aunque el día sea muy caluroso, disfrutaremos de un ambiente fresco.

En el recorrido por la Alcazaba veremos algunos patios con fuentes, nos podremos subir a las murallas, desde las que hay algunas de las mejores vistas de Málaga, y terminaremos en el palacio Nazarí, que ha sido reconstruido en su mayor parte y en el que se exponen algunos objetos de la época.

Porque ya está acostumbrada a que la comparen con la Alhambra de Granada, que la consideren su hermana menor, no tan espectacular y magnífica. Pero ella sabe, que aunque solo conserva la mitad del tamaño original, cuando era poderosa y temida, bella y admirada, tiene algo que "La Roja" no tiene, y es el mar.

Ninguno de los gobernantes granadinos pudo ver nunca desde ninguno de sus aposentos el Mediterráneo como se puede ver desde aquí. Ella sabe que la de Granada es admirada por sus estucos, sus caligrafías de poemas que embellecen sus muros, las cúpulas altas y profusas en decoración; pero la Alcazaba, que también es mujer, arropa orgullosa sus arcos trabajados, sus fuentes interiores y sobre todo el misterio de sus paredes.

Una visita que no debes perderte a tu paso por Málaga, es sin lugar a dudas "La Alcazaba", una impresionante edificación, que en su día fue residencia de reyes y gobernantes tanto musulmanes como cristianos.

La Alcazaba se empezó a construir bajo el reinado de Badis-Maksan, aunque más tarde el emir cordobés Abderrahmán I completó la construcción añadiéndole mas edificaciones. Seguidamente, los Reyes Católicos una vez tomada la ciudad, hicieron lo propio "cristianizando" su estructura y dependencias., eso fue entre los siglo XIII y XVI , llegándose a unir la edificación de la Alcazaba con el castillo de Gibralfaro por medio de murallas.

Un acceso muy fácil desde el centro de la ciudad de Málaga. Un paseo que nos traslada a la extraordinaria cultura nazarí. Una reflexión sobre el desatino que supuso la expulsión de los musulmanes de España. Una visión espléndida de la ciudad desde su punto más elevado. Precioso jardín. Una visita siempre recordada.