La catedral de San Pedro y San Pablo

Con más de 600 años de historia, la catedral de San Pedro y San Pablo es una de las señas de identidad del pasado cultural de Nantes. Un monumento en toda regla, que es parte del patrimonio nacional de Francia, y que no fue inaugurado hasta hace 120 años. Una joya gótica de puntas afiladas que ocupa un espacio importante dentro del centro histórico de la ciudad.

La catedral de San Pedro y San Pablo es impresionante en sus dimensiones sobre todo porque ocupa una plaza bastante grande en Nantes. Se encuentra a apenas unos pasos del Castillo de los Duques de Bretaña y su estilo es bien diferente al de muchos otros templos franceses.

Es una catedral atípica, construida durante casi medio milenio desde el S.XV.

Muy cercana al castillo de los duques de Bretaña, posiblemente sea más bonita por fuera que por dentro, particularmente de noche es un buen momento por los juegos de luces y sombras que pueden observarse en su fachada.

Esta catedral es un magnífico edificio gótico construido sobre las ruinas de la antigua catedral. La majestuosa fachada es aún mejor desde su restauración. El interior de esta catedral es bastante inusual y particularmente impresionante: la blancura de la toba caliza, el imponente tamaño de la nave (longitud 103 m, la altura de la gran nave de 37,5 m, el efecto de poder y la gracia de una fuerza inmensa y pilares). Y se pueden admirar las tumbas de Francisco II y Margarita de Foix (padres de Ana de Bretaña) de principios de siglo XVI.

Sensación de viajar al pasado y contemplar la historia de los pueblos.

Catedral de Nantes desde el castillo

La catedral San Pedro y San Pablo es super bonita y hay muchas cosas interesantes.