La piscina no es una piscina, bueno, es...
La piscina no es una piscina, bueno, es una antigua piscina, convertida en museo. Un lugar maravilloso porque cuando entras, en el centro todavía hay una mini piscina llena de agua, y alrededor están puestas las obras de arte. Forma parte del plan de renovación y modernización de la ciudad de Roubaix, antiguamente una ciudad industrial un poco triste, ahora es un lugar moderno y abierto al futuro.
El museo de arte y de industria André Diligent, llamado simplemente la Piscine, abrió sus puertas en octubre 2001, en el lugar de la antigua piscina municipal de Roubaix, un precioso edificio de estilo Art Déco. La piscina fue construida en los años 30, y hoy es monumento histórico.