La Rana

Mi restaurante preferido de Isla Canela. Es un pequeño restaurante familiar y pequeño, regentado por Ana en la cocina, la hija atendiendo las mesas y el padre que es el que sale a pescar todas las mañanas para ofreceros el pescado fresco del día. Con un comedor y una terraza para unas 25 mesas en total.

Mis platos preferidos: las coquinas, el tomate (obligatorio), los chocos, y las puntillitas y preguntar por el pescado del día (aquí me comí el mejor Rodaballo que he probado nunca, eso si lo he vuelto a pedir en otras ocasiones y nunca ha sido como aquella vez).

Aviso para navegantes es un restaurante que todo el encanto lo tiene en su sencillez (mantel de papel) y en la comida (no hay ni carta, se come lo que hay del día), no vayas a llevar a tu pareja a una cena romántica para celebrar un aniversario. A mi me encanta llegar justo a las 9 y 15 horas para ver antes de entrar el atardecer sobre el Guadiana.

Es toda una experiencia cenar en este restaurante. No es solo la comida, que es buena, sobre todo el tomate aliñado con una salsa con sabor a orégano y comino o el pescado a la brasa o frito. Es sobre todo el entorno, con una terraza mirando para la ría, el viento soplándote en la cara en pleno verano. Es un pequeño barrio de pescadores con una tranquilidad fuera de lo común.

Mi restaurante favorito en Isla Canela está llegando a Ayamonte, en la barriada Canela.

Pescaito de la zona de máxima calidad y segundos de auténtico lujo: besugo, rodaballo... Y de postre su mítica tarta de nata.

Uno de esos sitios que sobrevivirá pase lo que pase y pese a quien pese.

Leer los comentarios publicados sobre este restaurante nos han motivado a visitarlo y al hacerlo hemos descubierto gratamente que todos ellos se han quedado muy cortos. La relación calidad-precio es insuperable, nunca hemos comido pescado recién traído del mar por menos del doble de lo que cobran aquí.....y eso que vengo de tierra de mar como es Almería....en Madrid donde trabajo te cobrarían el triple. Ir a un restaurante en el que no tengan carta te garantiza una materia prima de máxima calidad y frescura, lo que sumado a su buen precio hacen de este lugar inigualable.
Si todo esto lo aderezas

Dirán que si turístico, que si el servicio. Nos atendieron a pesar de estar hasta arriba, tardaron lo normal y todo muy rico. Mesa con buenas vistas aún siendo interior. Un lugar sin pretensiones, con una carta sencilla. El tomate increíble. cazón y arroz. Precio más que razonable.

Magnífico sitio para comer pescado fresco. La ausencia de carta es una garantía de que pidas lo que pidas va a ser un acierto por el sabor y frescura del producto.
Muy recomendable