Carlos Olmo
Como la de Pisa, pero en Asia
La Torre inclinada de Ava, de 27 metros de alto, fue dañada por un terremoto en 1838, y es todo lo que queda del palacio del rey Bagyidaw. Es un milagro que todavía no se haya caído, ya que las únicas obras que han hecho ha sido ponerle una escalera exterior adosada, que produce un extraño efecto cuando la subes, ya que mantiene la inclinación de la torre.
Las vistas desde arriba son espectaculares y con un buen zoom pude sacar fotos de los edificios lejanos, a los que no me daba tiempo a llegar
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