¿Dónde querés ir?
Entrar
Mi perfil
Editar mi perfil
Cerrar sesión
Añadir experiencia
Publicar

La Última Thule - Sur de Islandia

{"logged":false,"user":null,"permissions":null}

1 opinión sobre La Última Thule - Sur de Islandia

Última Thule - Sur de Islandia

Excelente

Última Thule, así es como llamaban a Islandia los monjes irlandeses que la poblaron por primera vez en el siglo VI. En mi cabeza un reino imaginario mezcla de Julio Verne y el Príncipe Valiente, lleno de hielos y volcanes.

Llevaba en Reykjavik unas semanas cuando conocí a Peter. Supongo que ese no era su nombre real porque en Islandia uno no puede tener un nombre que no sea islandés de pura cepa.

Unos días después salíamos por la Ruta 36 en su vieja motocicleta hacia el corazón mismo de la República de Islandia: Thingvellir. Fuera de Reykjavik todo son pequeñas granjas en un mar de lomas verde como sostenido por volcanes y montañas en el horizonte.


Al llegar a Thingvellir decidimos primero pasear sin objetivo concreto, respirar en medio de las llanuras parameras y las rocas volcánicas.

El paisaje es bello, incluso después de "acondicionarlo" para el turismo con pequeños caminos señalizados. No pierde ni un ápice de su soberbia y salvaje grandeza, de sus tonos solitarios y verdeazulados.

Sentados junto a las fallas que dividen Europa de América y que cada año se abren 1 milímetro fuimos desgranando las historias de aquellas planicies abiertas como por una zarpa o un hachazo de Thor.

Un poco más allá la pequeña cascada de Oxarafoss indicaba el lugar donde arrojaban a las mujeres adúlteras. Las metían en un saco y las tiraban al agua. En otra cercana quemaron en el siglo XVII a nueve hombres acusados de brujería. Todas las culturas tienen sus cosillas.
Seguimos recorriendo los páramos verdes junto al río y el lago y tomamos rumbo a Geysir en la motocicleta.

Claro, Geysir es el geyser por excelencia, el chorro de vapor más famoso del mundo y bajo el que se ha dado nombre a todos los otros que existen. Pero resulta que el rey de los géiseres ya no funciona porque la sempiterna sabiduría humana y su afán de divertimento inmediato, no podía soportar que el pobre estallara cuando le viniese en gana. No, eso estaba muy mal, tenía que echar su chorrito cuando los señores estuvieran preparados y con las cámaras en ristre. Así que tras años de arrojarle piedras, tierra y jabón, pues al pobre poco menos que se lo han cargado.

Entonces Peter me condujo a otro un poco apartado y nos preparamos para esperar. Apenos unos minutos después el Strokkurm que así se llamaba, soltó su torre de agua pulverizada de forma impecable.

Muy cerca de allí, apenas a 6 kilómetros, se encuentra la catarata más famosa de Islandia. Dicen que el arcoiris vive en ella y que en los días en que nadie merodea por los alrededores, se despereza e inunda la pradera de colores.

En invierno sus labios se vuelven blancos del frío y el agua se va quedando más quieta, sin ruido, helada.

Antonio Cordero - La Tortuga de Luang Prabang y otras historias de viaje.
Leer más
{"logged":false,"user":null,"permissions":null}
¿Conoces este lugar?
Ayuda a otros viajeros a descubrir con tu experiencia y tus fotos
{"logged":false,"user":null,"permissions":null}

Información La Última Thule - Sur de Islandia