Un precioso atardecer en un lugar casi de cuento!!!
Ésta Laguna de saladas aguas llamada Rodrigo de Freitas, ofrece a los que la visitan innumerable cantidad de entretenimientos, bares, confiterías, paseos, juegos, espacios de lúdicos, bicicletas, kartings, canchas para jugar al básquet e innumerable cantidad de puestos de ventas de cocos con su fresco jugo para beber pero, lo que más ha llamado mi atención en este lugar es su espléndido atardecer que comienza muy tempano. Ya a la cinco de la tarde el sol se va escondiendo detrás de los cerros y vuelven los botecitos, lanchas y veleros a dejar los pasajeros en las orillas. El agua que se entremezcla con la del océano Atlántico por el Canal del Jardín de Alá, va tomado diferentes tonalidades que pasan de plata azulada con reflejos rojizos a convertirse en un espejo que refleja lo que flota y lo que lo rodea en sólo instantes.
Detrás de una hoja de palmera le tomo un par de fotos, para mí preciosas, y veo acercarse a la orilla los simpáticos cisnes a pedal con sus pasajeros. Los edificios parecen armados con lego por los niños en sus juegos, algunas ramas de arbolitos más nuevos van deshojando sus otoñales follajes; se encienden las luces de edificios y avenidas reflejando en sus rojizas aguas, el no tan lejano Corcovado y su famoso Cristo Redentor. El lugar es la Lagoa, los demás datos de Riotur. Autoridad de Turismo de Rio de Janeiro.


