L'Ampolla

De nuevo volvemos a l'Ampolla, antiguo pueblecito de pescadores donde veraneaba en mi infancia. La nostalgia, el delta, el mar, l'arròs me tira mucho.

El pueblo ha mejorado mucho y se ha dado paso al turismo casi masivo. Eso a veces no es nada bueno.
Antaño se comía muy bien ahora es difícil encontrar un buen sitio para comer. Comentamos varios sitios donde hemos comido en esta ocasion:

-Bar la estrella tapas: situado enfrente del club naútico y al lado del restaurante rafa. Comida a base de tapas de baja calidad (a excepción de los mejillones) precio muy alto para lo que ofrece. No nos gustó la experiencia.

En mi Camino hacia Santiago, tuve el placer de caminar por una ruta inesperada.

Comí en l'ampolla y empecé a recorrer la costa por un trayecto muy bien adecuado. Es la GR-92, los senderistas sabrán más de estas sendas. Una senda marcada de rojo y blando que te lleva a sentir la naturaleza en su estado más puro.

Subidas, bajadas, peldaños de madera y de fondo el mar Mediterráneo. Acantilados peligroso y aventura 100%. Totalmente recomendable el trayecto. Podrás tomarte tus respiros en las diferentes calas que van apareciendo.

Me gusta pasear por l'Ampolla, un pueblo de pescadores encantador, y me gusta descubrir pequeños rincones que hablan de tiempos pasados y de la vida de las personas sencillas.

Al atardecer, me acerco a la orilla de la playa y me dejo abrazar por su belleza tranquila. Es todo cuanto necesito para ser feliz.

Como todo pueblecito marinero, L'Ampolla tiene en la celebración del Día del Carmen su fiesta más emotiva. Sacan en procesión marítima a la Virgen del Carmen por la bahía, escoltado por varios barcos. Y, luego, de vuelta al puerto, unos espectaculares fuegos artificiales lo llenan de luz y color.

Por el paseo marítimo de L'Ampolla se tienen unas vistas magníficas del Mediterráneo y sobre todo de la parte norte del Delta del'Ebro.

Nosotros además tuvimos la suerte de tener unas nubes muy dramáticas a lo largo del recorrido, perfecto para fotografías.

Estamos veraneando en L'Ampolla por primera vez, el pueblo es pequeñito, acogedor y con encanto.

Tengo que recomendar sin ninguna duda el Restaurante Casa David. Es un restaurante de toda la vida, con un trato excelente y una comida espectacular.

Nosotros tuvimos que reservar en pleno mes de agosto ya que se llena todas las noches, y no me extraña.

La relación calidad precio es buena aunque no es barato, una media de 30 a 40€ x persona.

Hasta las nubes se posan en este pueblo encantador

Preciosas calas y paseos marítimos.

Cau el sol al port de l'Ampolla.