Fiesta, buena onda y nuevos amigos
El Loki del Mar se encuentra en el mismo pueblo de Máncora, sobre la carretera Panamericana Norte. Es fácil reconocerlo por el gran portón de madera con su nombre pintado afuera. Ya dentro del lugar es otro mundo: bar y restaurante, piscina, hamacas y habitaciones en dormís compartidos con una estética más de resort que de hostel. Las habitaciones cuentan con baño propio y un locker con toma-corriente para cada pasajero. No olvides llevar tu propio candado.
Así viajes solo o acompañado, ten por seguro que no te aburrirás por aquí. Eso sí, el Loki no es un hostel para "descansar" sino más para conocer gente, hacer nuevos amigos y celebrar cada noche porque nos sobran los motivos. Si eres de los que no les gusta el bullicio y necesitas absoluto silencio para descansar, te recomiendo quedarte en otra playa un poco más alejada de Máncora.