Lonquimay

Hay que poner ojo con este pueblo. Es el centro de todo un circuito que incluye canchas de esquí, termas y mucha vida al aire libre, además de un creciente turismo ligado a la cultura étnica presente en el lugar.
Hay actividad durante todo el año, mas es en otoño cuando las temperaturas, nevadas y colores son simplemente hermosos. Las canchas de esquí tienen reconocido nivel, en las faldas de los volcanes de la zona. Por ello mismo, las fuentes termales en los alrededores son abundantes y para todos los gustos.
Para la época estival también hay cosas que hacer. Mucho trekking, cabalgatas y ciclismo de montaña espera al visitante.

Al ingresar a Lonquimay se percibe que el pueblo esta calmo y a la vez expectante a la visita del forastero.

Su singular trazado de calles, sus casitas bajas y su gente hospitalaria permiten al visitante sentirse a gusto y en un bello lugar. La cultura esta diseminada en cada cuadricula, en cada sector, pared o construcción.

Un rico asado de chivo...