Lorenzo

Anduvimos por allí en compañía de una amiga y su pequeño niño pasando gran parte de una tarde de entretenimiento infantil y nos detuvimos en “Lorenzo” para hacer un alto en el camino y no sólo alimentar al niño sino proveernos de un muy buen licuado de bananas y duraznos acompañado de alfajorcitos de maicena y dulce de leche y un pastelito de membrillo para ellos, en tanto para mí el consabido cortado doble, un bizcocho y una medialuna salada que dicho sea de paso estaban muy ricos, al igual que el licuado que compartieron madre y niño quien después de esa hazaña termino con unos bellos bigotitos blancos.

Precios realmente muy accesibles, especialmente en los desayunos.