MALPICA, sabor a mar.
Pueblo marinero a la orilla del Atlántico en el comienzo de la famosa Costa da Morte. Callejas estrechas y empinadas con olor a sal y a mar por cualquier rincón. A un lado el puerto con su Lonja, sus barcos... y al otro la playa con su arena blanca, sus mareas...
Y al fondo las islas Sisargas. Parece que estás en el auténtico paraíso.
Merece la pena descubrirlo y sobre todo probar sus famosos percebes.