Además para ser un mercado está super limpio.
Uno de mis lugares favoritos de Bilbao, es bonito por fuera y por dentro. la parte interior de las vidrieras de colores con los edificios detrás también de colores parece una pintura de lo bonito que es. las vistas desde el interior son muy interesantes y lo mejor de todo es que para el otro lado de los puestos de compra hay un local enorme con multitud de bares de pinchos. es un lugar para estar, para hacer fotos y para disfrutar.