Arropado por las montañas
Cuatro años antes de que el pueblo de Honningsvag fuera arrasado por los alemanes nació un niño con una sensibilidad muy especial en una casita en el centro del pueblo. Con el paso de los años Knut Erik Jensen se hizo adulto y se dedicó al cine, algo de lo más natural ya que se crió en uno de los más cinematográficos y espectaculares paisajes de Noruega. La fama no se hizo esperar y pronto se hizo conocido por películas tan personales y enternecedoras como Cool & Crazy o Stella Polaris ( que recomiendo ver encarecidamente ).
El pueblo, orgulloso de su hijo pródigo que aún visita su villa natal en numerosas ocasiones, decidió levantar un monumento en uno de los puntos más latos de la comunidad, aquel desd donde se tiene una visión más completa y perfecta de la bahía y del mar. Hoy, los viajeros subimos hasta el punto que marca su efigie y seguimos su mirada, intentando ver todo aquello que él vio, todo lo que captó su atención, lo que despertó su imaginación y que aún sigue ahí, frente a nosotros.