Imprescindible su recorrido
El Lices es el amplio espacio de separación que hay entre las dos murallas que rodean La Cité de Carcasona-Francia. Yo recomiendo que antes de entrar en la Ciudad por la Puerta Narbonesa, que es el acceso principal, se recorra el lices (esa misma recomendación recibí yo de un amigo antes de emprender mi viaje y es muy acertada). El recorrido permite apreciar las distintas épocas de la construcción: las torres bajas y semicilíndricas de la muralla interior con ventanas todavía romanas y piedras toscamente encuadradas, pertenecen al periodo romano tardío (siglos III y IV); el Castillo Condal y parte de la muralla exterior pertenece al segundo periodo de construcción (Siglo VIII al XIII); la muralla exterior con torres cilíndricas y estrechas aspilleras se construyó durante el tercer periodo (mediados del siglo XIII, reinando San Luis IX); al cuarto periodo (finales del siglo XIII, reinado de Felipe el Atrevido como le apodaron) corresponde la Puerta Narbonesa, la Torre de San Nazaire y la reconstrucción de la zona meridional.
Empezando el recorrido por la izquierda encontraréis la Torre de la Vade, reconstruida en 1246; la Torre de San Nazaire es de planta cuadrada y sale de la muralla interior; la Torre Cuadrada del Obispo está entre las dos murallas; siguiendo el recorrido encontraréis la Torre del Trésau, dicen que la más hermosa de todas, se sitúa en la muralla interior. Al lado se encuentra, entre impresionantes torreones, la Puerta Narbonesa con sus barbacanas. En la parte que mira a la ciudad parece un palacio feudal con ventanas góticas, en el interior hay estancias y salones.
He querido recomendar este rincón porque me parece interesante reconocer cada torre y ver sus diferencias, para una mejor comprensión del lugar. Sin duda alguna merece la pena recorrerla tanto de día como de noche, quizás de noche el paseo es más sugestivo por el halo de misterio que la iluminación suscita. Yo seguí la recomendación de un amigo y desde luego disfruté del paseo, espero que vosotros también.