Javier
Paseando sobre siglos de historia.
Como todos sabemos, no nos podemos ir de Salamanca sin visitar su fabulosa catedral. Lo que no todos saben es que, desde hace unos años se puede acceder a la parte superior de la catedral.
El precio es muy barato (unos 3 euros si mal no recuerdo) y, si ya desde abajo observarla es impresionante, ya no os cuento lo que es verla desde las terrazas y pasillos elevados que esta tiene.
Por momentos puede que nos dé algo de vértigo puesto que se encuentran algunas partes algo agrietadas y, algunos tramos de escaleras son muy empinados. A mí, lo que más me impresionó, son las vistas que tenemos de la ciudad desde la terraza así como de los enormes pináculos y arbotantes vistos de cerca.
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