Museo Würth La Rioja

Würth es una empresa de tornillos (principalmente) y aunque esto pueda sonar al sitio menos visitable del mundo, es, de verdad, lo más guay que he visto en mucho tiempo.

¿Obras de Picasso, Magritte, Andy Warhol o Roy Lichtenstein en la más absoluta mitad de la nada? Sí. No puedo ser más fan de reaprovechar los espacios industriales para alojar el arte (véase el Matadero madrileño), así que el Museo Würth riojano me ha conquistado.

Vayamos por partes: Würth es, pues eso, una gran empresa alemana de tornillos y demás maquinaria (muy alemán esto) y su dueño, Reinhold Würth, un coleccionista de arte que en 2007 decidió abrir en el pequeño pueblo de Agoncillo una de las sedes de su Fundación.

Los polígonos industriales, esos lugares que parecen repeler la belleza y a los que nadie se acercaría salvo porque no queda más remedio que trabajar. Pero La Rioja es una tierra de excepción y en Agoncillo, escondido entre las fábricas y almacenes del polígono El Sequero, se encuentra uno de los mejores museos de arte contemporáneo de España: el Museo Würth.
Würth es una exitosa empresa de fijaciones y montaje cuyo fundador, Reinhold Würth, además de por los negocios, también se interesa por el arte y las condiciones laborales de sus empleados. Tanto que a lo largo de más de 50 años ha ido creando una magnífica colección privada que se extiende por diferentes espacios expositivos de Europa, reinventando así los espacios industriales de la compañía. En 2007 se sumó a la lista el de La Rioja, albergando actualmente obras de artistas de talla internacional como Miquel Barceló, Richard Deacon, Miquel Navarro, Jaume Plensa y Manolo Valdés, además de exposiciones temporales y muchas otras actividades culturales que se pueden consultar en su web.

¿Te imaginas una noche de verano en compañía de amigos, con una copita de vino, de la rioja por supuesto, buena música, comida variada en roulotte para elegir lo que mas te guste, rodeado de un buen ambiente, jardines, luces, y todo esto dentro en un museo? Pues existe. Así son las noches mágicas en el Museo Wurth de La Rioja, toda una experiencia para los sentidos, en un entorno único, que hace que pases una velada diferente, original y de lo mas entretenida. Se convierte en una noche inolvidable que hace quieras repetir todas las veces que se pueda, y eso es lo que yo hago desde que descubrí el museo suena de noche.

Despues de la visita, buen ambiente en la terraza, sobre todo las noches de verano.