mmozamiz
Una de las cosas que más me sorprendió d...
Una de las cosas que más me sorprendió durante el trayecto de Jartum a las montañas Nuba fue cuando nos encontramos nada más pasar el desierto con una tribu nómada. Se trata de un grupo de gente que nunca tiene un lugar fijo de asentamiento, se están trasladando continuamente de un lado a otro en función de las necesidades que tengan.
Se dedican al pastoreo y siempre llevan consigo un buen número de vacas (no son como las de aquí, son más grandes) ya que es de lo que viven. Cuando se asientan en una zona instalan unas casas hechas de paja que utilizan para dormir, ya que el resto de la vida lo hacen en la calle.
De lo que más dependen es del agua, en cuanto éste empieza a escasear se trasladan a otra parte.
La verdad es que te impresiona todo lo que ves. Me llamó mucho la atención el gran peso que tienen que llevar cada vez que se desplazan de un lugar a otro, ves a los animales cargados hasta arriba, es impresionante.
También llaman muchísimo la atención los niños, porque desde pequeños saben manejar perfectamente a los animales. Ves a niños que no tienen más de seis años montando ellos solos a unas vacas gigantescas.
Esta gente es bastante amable y agradable. Van a lo suyo y no buscan sacarte cosas en todo momento (esto es muy típico en toda África). Lo que más te choca es que no tienen nada de higiene, no se preocupan por ello lo más mínimo, y muchas veces, cuando te acercabas a alguno de ellos tenías que hacer esfuerzos para que no se te revolviera el estómago, porque tienen un olor muy fuerte.
¡Lo siento! me he equivocado y he metido cinco fotos que no pertenecen a los nómadas, creo que ya se ven cuáles son!
La verdad es que te impresiona todo lo que ves. Me llamó mucho la atención el gran peso que tienen que llevar cada vez que se desplazan de un lugar a otro, ves a los animales cargados hasta arriba, es impresionante.
También llaman muchísimo la atención los niños, porque desde pequeños saben manejar perfectamente a los animales. Ves a niños que no tienen más de seis años montando ellos solos a unas vacas gigantescas.
Esta gente es bastante amable y agradable. Van a lo suyo y no buscan sacarte cosas en todo momento (esto es muy típico en toda África). Lo que más te choca es que no tienen nada de higiene, no se preocupan por ello lo más mínimo, y muchas veces, cuando te acercabas a alguno de ellos tenías que hacer esfuerzos para que no se te revolviera el estómago, porque tienen un olor muy fuerte.
¡Lo siento! me he equivocado y he metido cinco fotos que no pertenecen a los nómadas, creo que ya se ven cuáles son!
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