Rodeado de agua
El pueblo de Granadilla tuvo que ser abandonado por la construcción del embalse de Gabriel y Galán, se pensó que el pueblo quedaría bajo las aguas del embalse pero no fue así y ahora es uno de esos pueblos abandonados que se está reconstruyendo poco a poco.
Se puede visitar y os aseguro que su visita merece mucho la pena, al igual que el entorno del embalse de Gabriel y Galán.
Granadilla conserva aún su muralla y se puede recorrer casi en su totalidad, las vistas desde lo alto de la torre son espectaculares.
Hay empresas de actividades complementarias que realizan muchas