Parador de Ciudad Rodrigo

Tras haber estado en varios paradores, éste me seducia por su aspecto medieval. Así que allí celebre mi cumpleaños en una habitación superior con dosel, un patio cerrado por una cristalera así se convierte en salones llenos de Luz para el parador, por cualquier lado se respiraba historia...esos preciosos tapizes, la armaduras...no dejar de entrar en el bar tiene un techo bellisímo y su famoso restaurante, que bien es sabido que la cocina de paradores es exquisitas y en este lugar para recordar.
Un personal tan atento en todo momento, y una ciudad preciosa que me gusto por lo singular.

Ambiente medieval en este precioso Parador: hay que fijarse en cada rincón. Dispone de un patio así como de jardín donde relajarse. Hay que visitar la Torre del Homenaje, la cual dispone de unas vistas muy hermosas.

Tiene una zona antigua, muy bien restaurada y que incluye una torre del homenaje visitable por unas pequeñas escaleras y un patio con jardín amurallado genial, pero que tiene algunos elementos más modernos integrados como una cúpula de cristal y plástico entre zonas de piedra que canta un poco.

Atención muy amable y habitaciones sencillas y funcionales, algo pequeñas para el estándar de paradores. Muy buen desayuno y restaurante, como no podía ser de otro modo.

Sobre la vega del Río Águeda, en Ciudad Rodrigo, se encuentra este espectacular Castillo situado en plena naturaleza, en un entorno inmejorable. El edificio cuenta con una antigua torre del homenaje que hoy en día sirve como mirador para observar los campos de alrededor.

En el interior, cuenta con un precioso patio. Las habitaciones alegres están decoradas con mobilario típico castellano. Su cuidado Jardín es el rincón ideal para relajarte.

En el comedor, podrás disfrutar de la cocina típica Charra, como los embutidos autóctonos, los sabrosos asados y jamones ibéricos de la región.

Un parador espectacular en un entorno inigualable

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