Hotel bastante nuevo cerca del centro
Se trata de un hotel muy moderno, situado fuera de lo que es el casco antiguo de la ciudad de Tallin, pero pegado a él. No costará más de 5 minutos de paseo a pie el llegar hasta las murallas que dan acceso al casco medieval de la ciudad vieja.
Consta de 245 habitaciones bastante amplias con baño privado y TV. Como nota a destacar he de decir que el Wifi va bastante rápido. Por el contrario, el punto negativo es que los pasillos se encuentren enmoquetados, no así las habitaciones, las cuales se ven bastante limpias, como todo el hotel.
En la planta baja y junto a la recepción se encuentra el acceso al restaurante. El restaurante del hotel se llama Kompass, y en él es posible tomar tanto comida típica estonia como otros platos de la cocina internacional. En este mismo recinto es donde se dan los desayunos por las mañanas. Se trata de un desayuno buffet donde no falta absolutamente de nada. Hay muchísima variedad de productos, desde los más característicos como embutidos variados, quesos o cereales hasta distintos tipos de pasteles, o yogures bebibles.