Un remanso de paz en pleno corazón de la ciudad
El parque, situado en el extremo sur de la ciudad y cuya superficie actual supera las nueve hectáreas, fue concebido en el año 1753 por Paul Marie Esprit del Bourdonnaye, mayordomo de Luis XV y a la sazón conde de Blossac, el cual, aprovechó los deseos de su majestad de poseer en Poitiers una plantación de moreras que saciase el apetito de sus voraces gusanos de seda para abordar la construcción de un gran jardín público.
Un emplazamiento estratégico
Hiedras y madreselvas ocultan a duras penas los restos de las viejas murallas que limitan el recinto y es que el conde decidió ubicar el parque que hoy lleva su nombre en un lugar conocido como "la Gilliers", estratégico emplazamiento desde el cual se domina el valle del Clain y que antaño ocupaban las defensas que protegían la ciudad.