Vicente Aparicio Carbonell
Un paseo inolvidable.
Un amigo de toda la vida me arrastró hasta este precioso lugar, internándome en el atrayente mundo del senderismo. Y mi comienzo no pudo ser más perfecto, en el Parque Nacional de Ordesa empezando por la vertiginosa y sacrificada Senda de los Cazadores para luego pasar a una caminata por la faja de Pelay, donde nos encontramos con el paisaje que aquí muestro. Verdor en todo su esplendor, una vista maravillosa que nos hacía olvidar las 4-5 horas que llevábamos andando en aquel momento. Una senda para repetir una y otra vez.