Dalt Vila

La primera vez que descubrí la ciudad de Ibiza era de noche. Las calles empedradas de casas bajitas y blancas subían hacia las murallas de la fortaleza, llenas de terrazas que bullían animadamente con gente. Desde la fortaleza se veía toda la ciudad vieja, con las callejuelas iluminadas y el puerto al fondo. Era una imagen preciosa. Repetimos al día siguiente, ya de día, para volver a pasear esas mismas calles, el ambiente de la mañana es distinto, pero sigue siendo encantador. Las calles estaban más tranquilas, pero había mercados, puestos de ropa y con la luz del sol se podía disfrutar las vistas de la ciudad en su totalidad.

Ibiza es magia y recorrer las calles de Dalt Vila, su casco antiguo, es una experiencia inexplicable con palabras. Lo mejor es vivirlo en persona, y si es antes del inicio de la temporada de turistas, mejor. El silencio es el mejor compañero para captar la energía mística que emanan las Islas Baleares, y en este caso, Ibiza.

Lo mejor del centro histórico de Ibiza es pasear por sus calles en las que, aparte de ser una belleza, te encuentras una sorpresa en cada rincón. Gran parte de este encanto se debe a las casas que hay por todo el casco antiguo. Os las encontraréis de todo tipo, desde las más cuidadas de piedra a las más sencillas, pero no menos bellas, pintadas de blanco y adornadas con flores. Lo mejor es que muchas de ellas a veces están abiertas y os podéis asomar a admirar los jardines y patios interiores que también son muy bonitos.

Dalt Vila significa Barrio Alto de la ciudad y esta redeado por las murrallas,todas las casas comprendidas dentro de ellas forman este barrio.El punto mas lato es la plaza de la Catedral desde la cual puedes ir bajando callejeando por unas calles preciosas y muy restauradas .Todo esta lleno de restaurantes,eso si un poquito caros pero ya se sabe cuando se va de vacaciones el dinero no importa si es por unos días.Por el día el precioso y por la noche tiene un encanto especial,nadie se debe de ir de Ibiza sin conocer DALT VILA.

Dalt Vila es la zona amurallada que hay sobre la colina que está situada en el centro de Ibiza capital. Esta zona amurallada cuenta con un total de cinco puertas de entrada al recinto, siendo la más popular seguramente el Portal de Ses Taules.

De Dalt Vila me gustan especialmente el empedrado del suelo y el blanco impoluto de sus casas, un blanco que te recuerda sin duda que estás en una isla del Mediterráneo. Es genial dar un paseo nocturno por Dalt Vila cuando las farolas iluminan en un color azafrán los pórticos y balcones aflorados de las casas.

El centro neurálgico de Dart Vila es la plaza de la Vila, en la que la fiesta no para durante las noches de verano pero que fuera de temporada descansa en un silencio absoluto.

Bonitas murallas y todo de gente, basicamente estrangera, tomando algo por la noche o simplemente paseando, muchos vestidos de blanco, tipico de Ibiza.

Una de mis zonas favoritas. Un paseo, una buena cena o comida, una copa, compras, un helado, buena música, historia, cultura, un viaje en el tiempo; todo en pocos metros, todo en el puerto de Ibiza y en Dalt Vila o ciudad alta.

Otra visita obligatoria en la que harás un regreso al pasado. Un laberinto de calles de piedras y estrechas, con casas muy antiguas de piedra y casas de pescadores, en las que podrás encontrar souvenirs, bares y restaurantes con una gran encanto.

Ideal visitarlo en invierno ya que el turismo es menor.

Se ve toda la ciudad y hay los cañones donde la vista es preciosa.