Una actividad que realmente recomiendo
Si hay una actividad que realmente recomiendo hacer en Jerusalén, es caminar por las murallas de la ciudad. En primer lugar, las vistas son increíbles, no solo de la Ciudad Vieja, sino también de la Ciudad Nueva. En segundo lugar, puedes ver cómo es la vida real de los residentes de la Ciudad Vieja. Desde lo alto de las murallas, puedes ver niños jugando en sus escuelas, abuelos palestinos tomando el té en patios soleados y gente de cada religión haciendo las tareas diarias en los tejados de sus casas.
Si quieres hacer el ‘Ramparts Walk’ (así se conoce), puedes comenzar en la Puerta de Jaffa y caminar por los barrios cristiano y musulmán hasta la Puerta de Herodes, o puedes comenzar en la Torre de David y caminar hasta la Puerta del Estiércol, cubriendo los barrios armenio y judío.
Hice el primer tramo y fue uno de los momentos más memorables de mi viaje a Jerusalén. Las vistas desde arriba de la Puerta de Damasco, con el zoco árabe a tus pies, la Cúpula de la Roca brillando en la distancia, y el hermoso caos de casas, campanarios y minaretes de la Ciudad Vieja, son simplemente inolvidables.
Un consejo: el sol en Jerusalén no es una broma y no hay nada sombra en las murallas. Si estás de visita durante los meses de verano, asegúrate de llegar cuando abre a las 9:30 de la mañana.
