Patio de los Naranjos

Debo coincidir contigo en que entrar al Patio de los Naranjos es como retroceder en el tiempo histórico y recordar las viejas lecturas, aquello que me contaran mis mayores, o una de mis hermanas menores que es la que más ha tendido la fortuna de viajar.Cuando estuve allí en septiembre del año 2008 el calor era prácticamente insoportable y el único refugio que encontramos fue a la sombra de esos magníficos naranjeros cuajados de naranjas aún verdes y el agua fresca de su fuente. Siempre me ha sorprendido, me sorprende aún cuando viajo por mi páis, observar como en épocas tan remotas pudieron construir

Remanso de paz en el corazón de Córdoba.

Es curioso que uno de los sitios mas relajantes de Córdoba se encuentre en el mismísimo epicentro de la actividad turística de la ciudad. El conocido como “Patio de los Naranjos” no es sino el patio de acceso a lo que en tiempos fue mezquita de Córdoba y tiene, efectivamente, la misma disposición y uso que los patios de acceso a muchas mezquitas islámicas actuales. La idea es dejar en la puerta de la mezquita, al entrar en ella, no solo los zapatos, sino el ajetreo del día a día.

Hoy en día esa última función se mantiene completamente intacta.

El patio de los naranjos forma parte de la mezquita desde sus orígenes. Dependiendo de cada época ha tenido funciones diferentes, desde sitio de oración hasta colegio para los niños expósitos de la época cristiana.
Es un sitio para contemplar y relajarse, oyendo la caída del agua de las fuentes y oliendo a azahar que despiden los naranjos.

Emblemático patio de la Mezquita-Catedral, con fuente, cipreses, palmeras y, cómo no, los naranjos que le dan nombre.

Sitio de reunión entre diferentes culturas, del pasado y de ahora, que da lugar a visitar la Mezquita de Córdoba.

Vista desde el Patio de los Naranjos.

El patio de los naranjos forma parte de la Mezquita de Córdoba, catedral. Era usado como patio de abluciónes. Lo que se conoce como el antiguo sanh. Se encuentra en la calle Torrijos y solo entrar con su aroma a azahar es impresionante.

Entrar, escuchar el agua correr y disfrutar del olor a azahar.