Peggy Sue´s

Peggy Sue es, sin ninguna duda, mi hamburguesería favorita de Madrid. Se trata de un pequeño local situado en la calle Amaniel, metros Plaza de España o Noviciado, decorado al estilo americano de los años cincuenta. La carta no es muy extensa, pero sus hamburguesas están hechas con carne de primera, de las mejores que he probado en Madrid.

Tienen tres especialidades: la Peggy Sue, la Mary Lou y la Aretha Franklin, a las que además puedes añadir ingredientes extra. Si prefieres los sándwiches, en Peggy Sue´s también tienes donde elegir: el chicken sándwich, el vegetal, baguet de salmón…

Como entrantes tienen unos deliciosos chicken fingers, y patatas fritas o aros de cebolla al más puro estilo americano. Los postres son otra de las cosas que no te puedes perder de este restaurante: brownie, NY cheese cake y rollitos de canela.

Fuimos por las recomendaciones de los usuarios de minube y porque estaba cerca. La verdad que me ha gustado mucho la cena aunque en este local no tenían hamburguesas "pre hechas" sino que uno tenia que escoger salsas y extras (lechuga, bacon, queso, etc).
De cualquier manera la carne estaba muy rica y, como la pedí a mi gusto, me encantó el resultado.
También los postres estaban bien ricos aunque si eres de poco dulce esto es un reto muy azucarado.
Finalmente destacar que el precio es muy ajustado. Dos hamburguesas, unos entrantes de aros de cebolla, dos postres y dos bebidas por 34 euros, muy bien. Lo único que se hubiera agradecido es que la hamburguesa incluyera una pequeña ración de papas fritas o algo de ensalada de col.

Una noche sin plan, un lugar de tantos que tienes apuntado en ese calendario mas basado en deseos que en intenciones. Pero a veces el deseo se impone a la intención.

Camino a un concierto en la sala Siroco me decidí por la hamburguesería americana. Quería dejarme evocar por el espíritu infantil americano, y Peggy Sue's te sugestiona a la década adolescente de los 50 y de los restaurantes de comida rápida.

Bien conseguido el ambiente, limpio, cómodo, iluminación y sonido, todo acompaña. La comida es un punto y aparte: no se le puede meter en el saco de los restaurantes de comida rápida, su calidad es superior, es evidente, pero le falta conducencia. Una ensalada cesar muy normalista, unos fingers de cebolla de rebozado infinito, aunque, eso sí, interior tierno y dulce. El sándwich vegetal diferente, pero no recomendable.

Recuerdo que el primer Peggy Sue's al que fui era este, el de la calle Amaniel. Poco a poco fui descubriendo más por todo Madrid, aunque creo que el de esta calle lo han trasladado, aunque no estoy muy segura.

Del Peggy Sue's lo más interesante es el sitio en sí: el típico bar americano de los 50 que tan acostumbrados estamos a ver en la televisión y en el cine. Todo muy chulo, muy bien decorado y el ambiente muy logrado. Lo malo es que la comida deja bastante que desear.

Pidas lo que pidas, todo viene congelado. Las patatas, las hamburguesas, las pizzas... Todo. Las ensaladas vienen preparadas, también los sandwiches y los postres... Una pena. Además, las raciones son muy pequeñas, pero también hay que decir que todo es muy barato.