Una piscina de agua salada
Os voy a descubrir otra playita preciosa de la costa llanisca. Está en el pueblo de Cué, al que se llega desde Llanes por la carretera que lleva a la playa de Toró. Una vez que llegas al pueblo, atraviesas una zona que es muy estrechita y a continuación a la izda, escrito en la pared de una casa, está la indicación a la playa. Sigues por un camino que te lleva al aparcamiento. Dejas el coche ahí, y a continuación bajas por el camino unos 400m hasta la playa.
La playa en marea alta casi no tiene arena, sólo un trocito a la entrada, pero es una inmensa piscina de agua salada donde bañarse en las frías aguas cantábricas.
De verdad que merece la pena que la visiteis. Además la vista desde el aparcamiento es preciosa.


