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A pesar de que no la recomiendo en...
A pesar de que no la recomiendo en pleno verano, ya que su proximidad a la villa de Luarca, un camping cercano y sus cómodos accesos la convierten en una especie de hervidero, la playa de Otur es tan paradisíaca que no puedes dejar de conocerla. Este mágico rincón asturiano se encuentra escondido en un entorno rural muy verde. Se llega a él desde el pueblecito de Otur, desde donde hay que conducir menos de 1 kilómetro por una pista en pendiente entre campos cultivados. La playa se ve al final, rodeada de bosques de eucaliptus. No es muy grande –tiene 600 metros de longitud- y su arena es fina y dorada. Aquí y allá está salpicada por grandes rocas, lo que la embellece aún más. Sus aguas son tranquilas, perfectas para nadar sin riesgos.
En resumen, un perfecto paraíso, menos en julio y agosto.
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