Praia do Mariscal

Mariscal es una playa de graaan extensión tanto a lo largo como a lo ancho. Más grande que la de Bombinhas, e incluso quizás sea también más grande que la de Bombas. Si bien hay más lugar para acomodarse, también hay más gente, no obstante lo cual, hay espacio suficiente para no estar unos pegados a los otros.
Se encuentra ubicada entre las playas de 4 Ilhas y Conceiçao.
Nosotros fuimos a esta playa una tarde a pie desde la playa de Bombinhas donde estábamos hospedados, ya que nos encontrabamos bastante cerca de 4 Ilhas. El camino (R. Peixe Dourado) es la mitad de ripio y la otra mitad asfaltada. No recuerdo cuántos km eran, pero hay que caminar un rato. En todo el camino no hay ninguna vista para apreciar, ni locales, ni nada; es como una ruta, donde los autos te pasan por al lado levantando polvo en la parte de ripio. Cuando estás ya cerca de Mariscal, hay unas vistas espectaculares de la playa donde se pueden sacar muy buenas fotos.

Uno de los paseos más lindos que recuerdo por las playas de Brasil, fue la recorrida que hicimos con uno de mis hermanos y su familia cuando nos quedamos a pasar unos quince días en esta zona y fuimos a Mariscal. En diciembre cuando aún hay poquísima gente se puede disfrutar de sus cálidas aguas, caminar por su playa de arena fina y blanca, algunas veces ya mojada al atardecer, sin el tumulto que suele haber en pleno enero, especialmente en la segunda quincena y todo febrero. Tienen excelentes servicios, todo el personal de chiringuitos, restaurantes y demás sitios a los que fuimos fueron muy cálidos y atentos, recorrer el ondulado camino bordeado de arboles de un verde intenso, con la blanca espuma retirándose de la playa y reflejadas en el agua aturquesada las nubes del cielo es como estar en el paraíso.