Demasiado restaurado
Desde siempre se ha considerado el origen de este puente como romano. Posiblemente existiera en el mismo lugar uno antiguo que habría sufrido diversas reformas durante la edad media y el siglo XVI, una más en 1973 y otra recientemente.
El puente consta de cinco arcos rebajados y escarzanos, siendo el más meridional el de mayor tamaño.
En la actualidad y como consecuencia del cambio de curso efectuado por el río Jarama, tan sólo corre un pequeño arroyo por debajo del arco mayor.