Puerto de Mahón

Son cinco kilómetros lo que mide el largo puerto de Maó, flanqueado por un bello paseo que nos permite una apacible caminata adornada por restaurantes, bares y tiendas donde comprar algún que otro recuerdo de nuestro paso por la ciudad menorquina.
Recomiendo empezar el paseo con una vista casi de pájaro, partiendo desde lo alto, donde se ubica la ciudad. Lleguemos hasta la Iglesia de San Francesc y descendamos al puerto por las escaleras que encontramos justo detrás del templo. Una vez abajo, estaremos en el llamado Moll de Ponent que se convierte, según andamos en el de Llevant.
Precisamente andándolo, nos damos cuenta del porqué es uno de los puertos naturales más importantes del Mediterráneo y la vista de la ciudad, asentada sobre su plataforma rocosa es realmente espectacular.

Menorca, que decir de ella que ya no se sepa o se imagine. Que decir, cuándo soñamos pisar su arena, oler su aroma, notar esa tranquilidad y saborear los frutos de su mar. Los cinco sentidos se quedan cortos al querer apreciar tal belleza. Menorca es un sitio único, como cada maravilla que hay en el mundo que no son pocas. Mentiria si digo que no hay que visitarla y también si digo que no volveré a ir. Encuentras tranquilidad, alegría, Sol y playa. Un pequeño paraíso que puedes recorrer en poco tiempo. Paisajes dignos de ver, que no te dejarán indiferente. Un Sol que aunque parezca mentira, calienta de una forma peculiar. Lo dicho, ¿Qué decir de ella, que ya no se sepa o se imagine?

Mucho se habla del amanecer del puerto de Mahón, pero casi nadie se centra en su historia. Hay que tener en cuenta que Menorca está en medio del Mediterráneo, y que Mahón está el punto más interior de una bahía larga y estrecha.

En el siglo XViII, los ingleses vieron, por capacidad y situación una gran oportunidad de establecer aquí un gran puerto, el segundo puerto natural más grande del mundo antiguo. Hoy el puerto de Mahón es un puerto con varios usos: deportivo, pesquero y comercial. Hay un paseo marítimo con abundantes restaurantes.

Junto al monasterio hay un mercado bastante agradable en el cual podemos encontrar productos típicos de la isla. Recomiendo el paseo en el yellow catamaran(11€ por persona) por todo el puerto de Mahón que tiene 16km, se puede observar La Mola, el hospital de Cuarentena de Lazareto.

Cada año paso unos días en Menorca y esta entrada al puerto a la salida del sol siempre me emociona, en el aire hay una olor y luz especial, es un lugar favorito para mi porque conlleva la espectativa de llegar, el volver a disfrutar de la isla.

Se está bien, y hay algún restaurante en el que se come muy bien.
ay mucho restaurantes donde elegir y algunas tiendas esta bien para ir a dar un paseo

El puerto de Mahón es el segundo puerto natural más grande del mundo.