belleza prehispánica
Continuamos por el "Valle Sagrado" de los incas hacía Raqchi , rodeada de cerros , domina valles fértiles iluminados por un intenso sol a 3.500 metros. Una comunidad campesina junto al río Vílcanota, con una iglesia católica contigua a sus casas, en otros tiempos tuvieron el (sol como deidad) principal.
Contiguas a las ruinas de del templo Wiracocha, un laberinto con diez gigantescas puertas guardaban el ídolo, sin rostro sobre un pedestal. Recintos con una arquitectura en adobe sobre muros de piedra, que sorprende, un total de veintidós edificaciones alineadas a patios
Mereció la pena para disfrutar de sus alfareros, de una población que se dedica también a la agricultura y ganadería. Sintiendose orgullosa de llevar el traje típico a diario, orgullosos de mostrarlo en todas sus actividades.