¿Dónde querés ir?
{"__vid":"w-ar-52.14.138.123-fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1-1739897554133","has":false,"userHash":"fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1"}
Entrar
Mi perfil
Editar mi perfil
Cerrar sesión
Añadir experiencia
Publicar

Reserva Natural de Marasha

{"__vid":"w-ar-52.14.138.123-fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1-1739897554133","has":false,"userHash":"fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1"}
+124
No esperes para reservar las actividades
Excursiones
(1 )
desde
$159,858.70

2 opiniones sobre Reserva Natural de Marasha

Simplemente increíble... un remanso de paz y naturaleza

Excelente

La reserva natural de Marasha está situada cerca de la frontera fluvial entre Colombia y Perú. Se accede a ella en lancha desde el Amazonas, para continuar a pie durante aproximadamente una hora a través de la selva. Esta caminata, lejos de hacerse pesada, nos permitió contemplar la gran belleza de un paraje apenas afectado por el hombre, y en el trayecto nos encontramos con una variada fauna que el amabilísimo responsable nos iba presentando.

Caminando llegamos al ecohotel que era nuestro destino; imposible describirlo solo con palabras, se puede ver en alguna de las fotos que acompañan a este texto. No nos engañemos, la comodidad no era su fuerte... Duermes prácticamente en el suelo y los baños y duchas no son más que un agujero en unas tablas con una cortina por puertas. Pero quien quiere comodidad se va a un hotel de lujo, no a la selva amazónica. Y sin duda, compensa, y con creces. El ecohotel está distribuido en cabañitas de madera con varias habitaciones y conectadas por pasarelas entre ellas y con el baño y el comedor comunal. En él se sirven los desayunos, comidas y cenas. Respecto a estos servicios, están francamente bien, teniendo en cuenta que no es fácil ofrecer una gran variedad cuando te encuentras en medio de la selva y a una hora a pie de cualquier vía de comunicación. Además, es una gran oportunidad para conocer a los demás viajeros (allí conocimos a un chico turco y a una familia de Calicanto con los que aún conservamos amistad), y también a la fauna local. Todavía recuerdo un día en que estaba desayunando, se me acercó un tucán, se puso al lado de mi plato y se comió mis huevos revueltos! Compartir desayuno con un tucán es algo que no te pasa todos los días.


Además, la caseta que nos tocó a nosotros tenía un balconcillo con un par de hamacas desde el cual teníamos unas vistas del lago absolutamente impresionantes. Sinceramente, no pueden describirse. La primera vez que me asomé, me quedé un buen rato con la boca abierta, y cuando salieron a llamarme, se quedaron igual.

El ecohotel tiene también un pequeño muelle desde el cual se puede pescar pirañas, y al final de éste hay una zona con un tejadito y con muchas hamacas que dan directamente al lago. Tumbarse en una de ellas a charlar con un recién conocido con esas vistas... no tiene precio.

Por la noche, se puede salir en las "canoas" a caimanear. Lo escribo entre comillas porque las "canoas" no eran otra cosa que troncos de una madera muy porosa cortados por la mitad y vaciados. Caimanear consiste en ir en una de estas "canoas" por el lago de noche e intentar ver caimanes, que se encuentran fácilmente por el gran brillo de sus ojos, que parecen un par de luciérnagas.

En definitiva, es un lugar en pleno contacto con la naturaleza. Tanto que, cuando te lavabas los dientes en el baño (por supuesto sin paredes) podías ver a dos metros de ti a una manada de capibaras que vivían allí, y como curiosidad, a las 19h. en punto cada día aparece por allí un tapir que ha aprendido que si va a esa hora le dan los restos de la cena.

Una experiencia única en un lugar único que a mí, personalmente, me marcó mucho. Una belleza sobrecogedora, una paz como en pocos sitios, muy buena gente y, miraras a donde miraras, solo naturaleza y respeto por ella. Un lugar al que volver sin dudarlo. Me quedo con una frase de mi madre al marcharnos: "Si alguna vez lo mando todo a la mierda, desaparezco y no sabéis dónde buscarme... estaré aquí"
Leer más
+9

Conectarse con la selva.

Excelente

En Perú, nuestro país hermano se encuentra este hermoso lugar donde se puede disfrutar de una conexión total con la naturaleza, compartir con lindos animales, una comida deliciosa y tener la oportunidad de vivir el Amazonas 100%

+4
¿Conoces este lugar?
Ayuda a otros viajeros a descubrir con tu experiencia y tus fotos
{"__vid":"w-ar-52.14.138.123-fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1-1739897554133","has":false,"userHash":"fac378ac3b3d3886829021b3309d4fd1"}

Información Reserva Natural de Marasha