Una experiencia única...!!
Pocas veces puedo uno presumir de haber asistido a momentos tan fascinantes como el que compartimos mi novia Toñi y yo en esta playa.
Aquel día nos quedamos a dormir en la playa con la esperanza de ver venir a las grandes tortugas a deshovar; de hecho las huellas de dos enormes ejemplares estaban ahí de la noche anterior; no pudo ser, esa noche no vino ninguna. Sin embargo a eso de las dos de la madrugada la naturaleza nos regaló un momento inolvidable. Casi una docena de pequeñas tortugas rompieron el cascarón, salieron de sus agujeros y se fueron todo lo rápido que pudieron a la playa. No, no les hicimos fotos, unos ecologistas que estaban presentes vigilando para que no sucediese nada anormal, nos dijeron que los flases de las cámaras les podían asustar.