maria
Un lugar muy romántico
Las vistas son preciosas, las mesas dan a la playa y podemos disfrutar de la brisa marina mientras comemos.
Los platos son muy originales, lo que parece huevo frito con patatas es mango con nata, ¡riquísimo!
El precio es algo elevado, pero la comida se nota que es de calidad y con diseño. Lo recomiendo para una ocasión especial.
+4