Buena comida, genial ambiente
Cenar en este restaurante es una fiesta. Es un restaurante enorme, donde las familias y grupos de amigos vienen a celebrar bodas y fiestas especiales en grandes grupos. Por eso el ambiente es siempre tan divertido y festivo. Consta de una sala enorme interior donde la música suena realmente alta y un jardín donde tocan música tradicional.
Si te apetece fiesta, bailar con los uzbekos entre plato y plato y participar de su celebración no lo dudes: dentro es tu lugar (eso sí, tal vez no puedas hablar por el volumen de la música). Si lo que te apetece es concentrarte en la comida, vete fuera, donde el ambiente es más relajado (y más serio).