Tradición en un ambiente cool
Paseabamos hasta El Peine de los Vientos mientras haciamos un descanso en nuestro curso de la Escuela de Verano y a mi compañera le llamó la atención este restaurante, después recordó que estuvo con su marido y ya, no pudimos decir que no para cenar en él;-)
Que puedo decir, que le doy las gracias por su tozudez, el Restaurante Branka es una delicia de lugar, primero por sus vistas, ya que se encuentra ubicado en el primer piso de un edificio acristalado donde además se puede disfrutar de un bar de pintxos, local de copas y terraza mirador. Después, por la exquisita atención, y por útlimo por la calidad de sus platos y su carta de vinos.
A pesar de su modernidad y de lo poco atractivo de su fachada, el Branka ha supuesto una sorpresa en nuestro viaje a San Sebastián. Degustar platos como el pulpo a la parrilla con crema de patatas y pimentón de la Vera, un suculento arroz o los increibles postres mientras miras la presiosa bahía de la Concha y la Isla de Santa Clara es todo un placer para los sentidos.
Después de la fiesta gastronómica que nos dimos, acompañado todo de un buen vino, subimos a la terraza a disfrutar de una bonita y luminosa noche de verano. Ahora, desde aquí podemos contemplar la Bella Easo y tomar una copa para finalizar una estupenda jornada gastronómica.


