Restaurante Bridge (lado asiático del Estrecho de Bósforo)

En increíble pensar que hasta 1973 el Estrecho del Bósforo sólo se cruzaba en ferry, o, en las pocas veces que se congelaba, a pie. El espectacular puente colgante es uno de los más largos del mundo, y al cruzarlo uno se encuentra de pronto en el lado asiático de Estambul. Entre los estambulíes –tan románticos y amantes de las cosas bellas y los bueno momentos- es muy común cruzar el puente para ver el atardecer. El momento es francamente impagable. Uno de los sitios más concurridos es el elegante restaurante Bridge, emplazado muy alto sobre el puente. Obviamente, en Bridge se puede cenar, pero lo mejor es sentarse en uno de los comodísimos sillones en la terraza y tomar té.