Este restaurante es un de los...
Este restaurante es un de los poquísimos con encanto que hemos visitado. De ambiente totalmente familiar su pequeña pero exquisita carta se basa en la cocina pirenáica hispano-francesa sobre todo en lo que concierne a las salsas.
El día que fuimos tuvimos que esperar algún tiempo a que el dueño apareciera después de ir a coger unas cuantas setas por la montaña. Estábamos completamente sólos y fue esta persona el que hizo de camarero y de cocinero. El menú fué una entrada de un estupendo paté seguido de unas tortillas con setas y después una carne guisada con una salsa verdaderamente exquisita. El precio de los tres ascendió a 90 euros con postre y bebida.