Restaurante Casa Palacio

La comida de éste restaurante sólo se define con tres palabras: Rico, rico, rico. Y hace falta decirlo las tres veces.

Tiene todo lo que quieres de un restaurante genial: Una decoración de ladrillos caravista estupenda, un servicio sublime que está todo el tiempo pendiente de que tengas para beber y que retira los platos en su momento justo y súper amables, pero como digo, la estrella son sus platos, imaginativos, vistosos y deliciosos.

Un estupendo hotel con una atención personal y familiar y una cocina rica rica. Laureano y María José, sus propietarios, os harán sentirnos como en vuestra casa. Muy recomendable para alojarse y para comer. Además es de los pocos hoteles en la zona que acepta animales domésticos, para que puedas disfrutar de este paraje en compañía de tu mascota.

En el restaurante vas a pagar precios de Capital, pero sin calidad. Si vas de menú perfecto pero no busques un buen restaurante.

¡Batallero! Ah y los camareros muy bien enseñados, te cobrarán un gin tonic al precio de una tónica con mucho hielo. Quizás con suerte, encuentres en el fondo del vaso la Ginebra.

Un lugar muy acogedor