Elite

Estamos ante un restaurante con historia. Sus orígenes se remontan a 1932 y, desde entonces, ha sido uno de los restaurantes preferidos por los artistas y por el mundo de la cultura de Finlandia, entre otras razones por estar muy cerca de una residencia de artistas. Ese influjo cultural se percibe en su interior, entre otros aspectos, por las placas con el nombre de los artistas en las mesas en las que solían sentarse.
Su decoración es muy clásica, aunque bien cuidada,sin destacar por los excesos o carencias.

En cuanto a la comida, es de muy buena calidad, tanto la carne como los pescados y las raciones bastante abundantes. Cuenta con una amplia carta en la que destacan los entrantes típicos del país y diferentes tipos de carne y pescado. El solomillo a la pimienta, por ejemplo, es muy recomendable. Además, ofrecen lo que denominan "Clásicos", como los arenques fritos con puré de patatas, y varios postres a cual más apetecible, como es el caso del pastel de chocolate caliente con mousse de mascarpone al Cointreau.