RELACIÓN CALIDAD-PRECIO
Es un restaurante de comida oriental, que fusiona en su carta especialidades de cocina cantonesa, tailandesa y japonesa. El local es muy cómodo y bastante amplio. Como casi siempre he ido con un grupo grande hemos probado muchos platos distintos y la verdad es que todo está muy bueno, cabe destacar el pato laqueado, las tiras de solomillo caramelizadas, el solomillo con salsa de ostras, el sushi, bueno voy a parar porque en realidad todo está estupendo. Las raciones son bastante grandes por lo que si pides demasiado para picar, sobra demasiado de los segundos platos. Tiene una excelente relación calidad-precio.