Lo peor
Cogí reserva con un mes de anticipo para celebrar el cumpleaños de mi padre y el día de la madre con mi pequeño de un año e incluso mi aniversario de boda. Nada más entrar ya se notaba que estaban desbordados y sin orden alguno.
Nos sentaron en una mesa enorme que no nos oíamos unos a otros, no se ciñeron al menú, la calidad muy pobre, mi padre se cayó cuando se le rompió la silla de playa en la que nos sentaron y tuvieron muchas críticas por ello porque el 80% estaban sentados en sillas de playa y para colmo un camarero respondiendo de malas formas.
Otros dos camareros que parecían los encargados, pero no lo eran, se disculparon y reconocieron que se les había ido de las manos, pero nada nos quitan el mal día que pasamos y la celebración que debió ser feliz terminó sintiéndonos fatal y disgustados por el trato y el golpe de la caída de mi padre que tampoco es que hicieran mucho por él.